Una semana de matices...

Sábado

A pesar de que hoy sigue siendo un día de la semana "pasada", los matices de la semana próxima comenzaron hoy. Me cuesta mucho hablar de esto porque lo siguiente tiene un costo emocional bastante significativo por todas las razones que cada uno de los que me leen y conocen desde siempre, pueden interpretar en mi entrelineas.

Lo cierto es que el día había comenzado medio "torcido" pero traté de enderezarlo al aceptar la invitación de una colega, a caminar con su hija hasta el zoológico que, según le comentó su vecina, lo habían reabierto porque ya estaba terminada la remodelación del zoológico. En la caminata nos encontramos con otro colega y le preguntamos si quería venir con nosotros y él aceptó. Así que nos fuimos a almorzar allí con la idea de estar al aire libre y muchas posibilidades de mantener el distanciamiento social.

Realmente la remodelación llegó hasta el anuncio de la entrada. Dentro sigue siendo un lugar bastante abandonado pero tiene un café-restaurante al aire libre muy agradable. Así que decidimos quedarnos allí y ordenar comida porque los precios y la calidad estaban muy bien y lo mejor de todo era lo grato que se estaba debajo de la sobra de todos esos grandes árboles. Muy agradable.

Allí estuvimos unas 2 horas y luego cada quién cogió su rumbo para su casa o cosas por hacer. Yo me fui con esta colega y su hija al supermercado "joyería" porque ella necesitaba comprar algunas cosas y yo también.

Llegué a casa cerca de las 17:30 y recordé que mi hija Emma me había pedido que le llamara. Así que decidí llamarla y hablar un rato con ella. Mientras hablaba con Emma, estaba sentado en el sofá de la "casa" y, después de un rato, sentía algo que se me estaba molestando en mi bolsillo. Cuando palpo, veo que es mi otro teléfono que me dio la escuela. Al sacármelo del bolsillo, me doy cuenta de que tengo un mensaje de WhatsApp de la Dra. Paul, la doctora que trabaja en la escuela. Abrí el mensaje y empecé a leer. Quedé absolutamente en shock cuando me informaba con una foto lo siguiente:

Me costó mucho asimilar el contenido del mensaje porque era muy difícil aceptar que, de treinta y cuatro (34) personas que voluntariamente fuimos el Miércoles pasado a hacernos el test del COVID-19, yo era en único que había salido positivo. Comenté de una manera muy brusca el resultado con mi hija Emma y le dije que debía colgar para llamar a la Dra. Paul a ver qué más me tenía que decir sobre el protocolo a seguir.

Debo decir que me hice el test de manera voluntaria y para hacerle ver a los alumnos y colegas que se anotaran en este test de "muestreo". Cabe indicar que, en la escuela los alumnos me tienen el apodo de "Mr. Mask Police" porque estoy SIEMPRE recordándole a los alumnos, profesores y administrativos, que se coloquen debidamente la máscara, que guarden la distancia social y que usen el gel para desinfectarse las manos. Soy también el único profesor que usa doble máscara y hasta un "face shield".

La noche de hoy fue "única" porque, como es natural, me puse a buscar información y a hablar con personas que conozco y qué les ha dado COVID-19. Yo no he experimentado NINGÚN síntoma de NADA. Lo cual indicaba que tal vez era asintomático. Pero también me dijeron que el test que me hice no indicaba con certeza que esto fuera así. Lo cierto es que la Dra. Paul me dio la lista de los medicamentos y las indicaciones. Ella me dijo que ya había reportado mi caso al Centro Nacional de Estudios Bacteriológicos para que me prepararan el tratamiento y que estuviera listo para yo recogerlo el Lunes a las 09:30.

No sé cuánto leí sobre el fulano virus y los últimos avances para combatirlo. Descubrí también lo fuerte  que es la variante Sud-africana y lo peligrosa que es por contaminar en un alto porcentaje y en su mayoría, dejar a las personas asintomáticas.

A las 22:45, resolví irme a dormir y tratar de no pensar en mi nueva realidad.

Domingo

Me levanté muy temprano y me puse a avisarle a todas las personas con quien había estado en contacto directo, a cerca de mi nueva realidad. Varios colegas de la escuela, no me creían y pensaban que era un mal chiste. Al compartir la foto de mis resultados, entendieron que no estaba bromeando. La directora fue una de las primeras personas en enterarse pero ella no me llamó sino hasta que yo le envié un mensaje para que por favor, me llamara.

A veces tenemos unos instintos muy buenos y que uno siente que debe seguirlos y que nos "dicen" simplemente no hacer ese "algo" que esta pendiente pero que no quieres, por ese mismo instinto, de hacerlo.

Acordé con la Dra. Paul en encontrare con ella mañana en el centro de inmunología para recoger mi tratamiento para "asintomáticos". Repito, no he experimentado ningún síntoma de NADA. Esto me hace pensar en que puedo ser un "falso positivo" porque es sumamente raro que yo sea el único de la escuela con un resultado positivo y soy el que más se cuida y sigue todo el protocolo.

En fin, aproveché que hay agua y me puse a lavar ropa y a hacer un poco de limpieza. Cuando estoy nervioso, me pongo a cocinar o a limpiar.Simplemente me relaja.

Ya son las 21:45 y estoy bastante cansado de todo lo que he hecho hoy. Así que me voy a la cama a mi encuentro con Morfeo.

Lunes

Me desperté muy temprano. Creo que tiene que ver con el estado de ansiedad que me invade. He decidido ir a otra clínica privada y hacerme otro examen para cerciorarme de que realmente tengo COVID-19 o si soy un falso positivo.

Salí muy temprano camino a esta clínica que queda a unos 25 kilómetros a las afuera de la ciudad pero a orillas del rio Congo. Llegué allí a las 08:40 porque había un tráfico tremendo. Después de mucho esperar, me hice el test y salí de allí corriendo. Esta es una "clínica" que también atiende gratuitamente a mucha gente. En este lugar también hacen gratis los test de COVID-19 y las filas para esto son infinitas. Lo cual me causa doble preocupación porque no sabes si te vas a contagiar o simplemente tu muestra va a ser confundida con la de cualquier otra persona. En realidad es mejor no pensar en ello porque termino atormentado por las dudas que toda esta situación despierta en mí. 

Hoy no di mí clase de español porque todos mis alumnos estaban, al igual que yo, haciéndose el test COVID-19. Claro, nadie de la escuela sabe que me hice un segundo test porque aquí no creen en los "falsos positivos" y explicarle a alguien que no desea entender, es realmente perder el tiempo. 

De la "clínica" me fui directo al Centro Nacional de Epidemiología porque me remitieron allí para recoger mi tratamiento como asintomático. Me cuesta describir con palabras el lugar. No sé con cuanta gente hablé pero estuve casi 40 minutos dando "tumbos de un lado a otro. La entrada del lugar tuvo sus lustros. El resto de las instalaciones reclaman a gritos un poco de atención.

En estos bancos se sienta la gente a esperar sus medicamentos para combatir el COVID-19. Después de esperar por más de 40 minutos, y que no me senté en ninguna parte, me dijeron que los medicamentos que repartían allí no aplicaban a mi caso. Es decir, los medicamentos que daban allí son para las personas sintomáticas. Como "mi diagnóstico" es que soy "asintomático, me dijeron que debía de ir a otro lugar. Me fui a ese otro lugar donde me tocó esperar por más de 3 horas para que me dieran el tratamiento.

Confieso que recogí el tratamiento pero no lo voy a comenzar a tomar hasta que reciba los resultados del test que me hice esta mañana. Prefiero esperarme porque me cuesta creer que, según el resultado del test de la semana pasada, soy asintomático.

Llegué a casa cerca de las 15:00 y muy cansado de estar esperando parado bajo el sol por más de 3 horas. Ahora son las 20:25 y pude darme una ducha gracias a que llegó el agua hace un poco más de media hora. Morfeo me está llamando.

Martes

Me levanté un poco más tarde de lo normal. Ahora son las 08:45 y ya leí los emails. He contestado la gran mayoría de ellos y hay algunos que voy a esperar para sugerirle citas zoom.

No  tuve reuniones con el "Leadership Team" y esto, honestamente, me alegra mucho porque no tengo el más mínimo deseo de discutir sobre ningún asunto. Ya di mis clases de español y estuvo bastante bien. Hoy les comencé un repaso para el test que van a tener la semana que viene. Esto estuvo de verdad muy bien.

Cancelé mi clase de la tarde porque tengo que estar a las 13:00 buscando mis resultados del test que me hice ayer. Salí de casa a las 13:00 y tomé un taxi para que me llevara al hospital francés que está a las afueras de la ciudad. Había mucho tráfico pero el paisaje era realmente hermoso. Tomé estas fotos que no le hacen realmente honor a lo bello del paisaje del rio Congo.

Llegué al lugar y me tocó esperar cerca de hora y media para recibir los resultados y estos eran, lo que yo me esperaba.

Les puedo jurar que el alivio que me dio fue inexplicable y que no pude expresar. Enfrente de la clínica hay un bar. Allí me fui y me tomé una cerveza no solo para celebrar sino por el calor tan extremo que hacía (+38C). Mi decisión de no haber comenzado el tratamiento, fue la correcta. Las dosis de cocktail de antivirales y antibióticos es sin comentarios. Todo un tanto "experimental".

Llegué a casa muy predispuesto y pensando que realmente no puedo creer en los test que hacen aquí, no solo por lo que me ha sucedido a mi, sino por lo que le sucedió a mi colega con su hija que ambas fueron a hacerse el test y los resultados salieron negativos pero bajo un solo código. Es decir que le asignaron código a mi colega pero sí a la hija. Mi colega reclamó y le salieron con el cuento que cuando madre e hija tienen el mismo resultado, usan el mismo código. No había escuchado semejante barbaridad en un tiempo.

Lo cierto es que resolví sacarle el mayor provecho a este resultado y arreglé mi boleto para irme a pasar mi período de "reposo", en Bruselas. Es una situación complicada porque, no pienso decirle NADA a mi jefe. Esto porque estoy enseñando "online" y no requiere que yo esté aquí en Brazzaville. No le he dicho absolutamente nada a mi jefe sobre el resultado del test que me hice ayer y no pienso decirle nada. Esto porque ella ha estado absolutamente en contra, desde el principio, de mi posición de reforzar las medidas de control y protocolos en la escuela. Ella ha estado en desacuerdo y esto ha sido un punto divergente entre ella y yo. Ahora aún más, cuando yo obtuve un resultado positivo. Ella no me llamó hasta que yo le pedí que me llamara y la conversación fue absolutamente desagradable. es muy difícil lidiar con una persona extremadamente emocional. Una cosa es liderar y otra, muy distinta, es gerenciar. En su caso, su liderazgo es inexistente y ella es asidua de lo que se conoce como la micro-gerencia. Lo quiere controlar todo y esto no permite que las cosas y procesos tomen su forma y los involucrados asuman sus responsabilidades. Es MUY difícil conseguir un balance en el ejercicio de funciones de muchos colegas y hasta del mío propio. Es muy común aquí en África, conseguir un estilo de "liderazgo" comunalista.

Acabo de hacer una reservación de vuelo para irme el Jueves próximo. Vamos a ver qué pasa. Ya son las 21:05 y estoy muy cansado.  Necesito atender mi cita con Morfeo.

Miércoles

Me levanté cerca de las 08:00. Tengo clases a las 08:50. Así que tuve tiempo de leer mis email, contestarlos y leer un poco las noticias. Desayuné muy rico con arepas y ahora inicio mi clase  de  español.

La clase estuvo muy bien. Mis alumnos ya saben mi estilo de clases online y me han confesado que trabajan mucho más cuando estamos "online" que cuando estamos de manera presencial. A ellos les gusta mucho la parte de mis clases "online" donde ellos deben de "dar las clase" porque se sienten muy responsables de que todos los demás entiendan. Estos chicos han demostrados muy responsables.

Hoy sí que es un día corto. Nos pienso asistir al "Secondary Meeting" y mucho menos al "faculty meeting". Después de decidirlo, recibí una comunicación donde nos informan a todos que ambas reuniones estaban canceladas. Esto me dio un gran alivio porque hay muchas cosas que atender.

Ya son las 20:35 y Morfeo me llama a gritos. He estado trabajando bastante y el cansancio apremia. He estado haciendo maletas y limpiando para dejar TODO listo.

Jueves

Hoy es el día de mi vuelo. Estoy muy emocionado el irme de este país por un tiempo. Necesito regresar a una normalidad que me re-oriente hacia la "normalidad" y me permita regresar a mi centro de la normalidad.

Me paré temprano para revisar mi email y contestar los que requerían respuesta. Luego di mis clases de español y terminé de arreglar mis maletas. Pienso salir al aeropuerto a las 18:00. Mis colegas van a venir a recoger las llaves de mi apartamento, en caso de emergencia.

Son las 19:20 y acabo de llegar del aeropuerto. No me permitieron abordar el avión porque, según el gerente del aeropuerto de Air France, mi test tenía mas de 72 horas (2 horas más). No puedo expresar los sentimientos encontrados que sentí en este momento. Me dio un torbellino de emociones que, en su momento controlé, pero que al regresar al complejo donde "vivo", afloraron en toda su extensión. Me tocó subir los cuatro pisos (75 escalones) los 105 kilos de equipaje que llevaba. He sudado como nunca. Tuve que sentarme por unos 20 minutos para poder hacer cualquiera otra cosa.

Llamé a Air France e hice una nueva reservación para el Sábado. Mañana voy a repetir el test -a ver qué sale- para cumplir con el requisito y tratar de irme el Sábado por la tarde. Reorganizando todo el tema del vuelo, me costó más de 2 horas porque el proceso de hacer un "rebooking" normalmente te cobra porque las tarifas tienden a ser diferentes. Así que en esto tuve que invertir unas 2 horas.

Ahora estoy MUY cansado y, por qué no decirlo, frustrado con toda la logística que uno debe asumir cuando hay una situación "extraordinaria". El costo emocional es tremendo porque aquí uno está solo y tiene que organizarse MUCHO para conseguir cumplir con TODO.

Ahora, a pesar de sentirme muy frustrado, voy a tratar de dormir.

Viernes

Este viernes es un día de fiesta para la escuela y no hay trabajo. Esto realmente una bendición para poder irme a hacer el test del COVID-19 muy temprano. Así que levanté como cualquier día laboral y creo que hasta un poco más temprano. Ya estaba buscando un taxi a las 06:40 para que me llevara a la "clínica" que queda a las afueras de la ciudad. Llegamos allí a las 07:15 y ya tenía una persona por delante. Del lugar salió un muchacho muy joven a repartir unos tickets con números. Me tocó el número 2.

Me tocó esperar hasta las 08:20 cuando finalmente me llamaron para hacerme el test. Este es el test COVID-19 número 15 que me hago. Así que, sin sentirme orgulloso, experiencia en esto tengo. Mientras esperaba, me preguntaba si esto es algo que debo colocar en mí CV. a veces nos ponemos tontos pensando en sandeces nada productivas. Pero ciertamente lo que yo buscaba era en no pensar mucho en la "realidad paralela" de saber que una vez salí positivo y hace unos días salí negativo. Las cosas que se te ocurren y pasan por mi mente, son para realmente no contarlas.

Mientras esperaba hubo un altercado tremendo con la gente que llegó un poco después que yo. Yo casi que me escondí porque era el único "blanco" y aquí tienden a culpar al que no es igual a ellos. Así que mi instinto de preservación se activó y resolví salir del lugar mientras resolvían la algarabía. Volví a entrar, cuando llegó la policía. Sí, a esos niveles llegó la cosa. Muchos venían a hacerse el test pero no querían pagar por el test. El único lugar que conozco donde no pagas es en el Centro Nacional de Investigaciones Científicas que queda en el centro de la ciudad y allí va todo el mundo porque el test es gratis.

En medio de mi ansiedad, le pedí al taxista que me llevara a una barbería. Tenía el cabello tan largo que ya me salían bucles. Me crece el cabello muy rápido. El último corte de cabello me lo hice en Tenerife 2 días antes de regresar a Bruselas. Aquí, en el tiempo que tengo, nunca me había cortado el cabello porque no conocía un lugar de confianza o que alguien me pudiera recomendar. Al final este me lo recomendó un padre hace unos días, cuando me dijo que había llegado tarde a la cita conmigo, porque estaba en la barbería. Y así fue como supe de este lugar. El corte me quedó bien.

Me vine a "casa" y por suerte conseguí agua y me pude dar una ducha. Acto seguido, me reordenar las maletas y a comerme cuanta cosa había dejado en la nevera. Por suerte se me olvidó darle a mis colegas la comida que había dejado en el refrigerador.

Me fui a caminar un poco para calmar los nervios y me encontré con este espectáculo de atardecer.

Ahora son las 21:40. Me voy a meter en mi cama a leer un poco a ver si logro tranquilizarme. Creo que Morfeo se fue de "bonche" porque ni una gota de sueño tengo. Y creo que mi amiga la luna tiene mucho que ver con que no tenga sueño 

Sábado

El clarinete me despertó como siempre a las 06:45. Me invade una flojera tremenda. Tengo que esperar los resultados de mi test que me los van a informar entre 10:30 y 13:00. Hasta entonces viviré en ansiedad y sin saber si realmente podré viajar hoy. Por lo pronto, me refugio en lo que me tranquiliza.

Ahora son las 09:10, ahora me voy a comer algo de desayuno y luego me ducho. Pienso dejar todo listo y, sí a las 11:30 no me han llamado, saldré a la "clínica" a buscar mis resultados. Le he dicho a mi amiga la angustia, que me deje tranquilo porque necesito calma.

Llegué a la "clínica a las 13:00 y ya había un gentío esperando por los resultados. Tuve que meterme hasta la oficina de adentro para pedir mis resultados. Debo decir que esta vez me resultó hablar inglés y no francés. Me preguntaron sí yo era uno de los extranjeros que tenía urgencia de recibir sus resultados y les dije que sí. Resultó que ellos estaban esperando un grupo de norteamericanos recomendados por la Embajada de USA y me confundieron con uno de ellos. Esto, jugó a mi favor y recibí mis resultados inmediatamente.

Salí corriendo a buscar mis maletas y desde allí directo al aeropuerto. El check-in estuvo "especial" porque no había nadie y  pude pasar muy rápido. Esto es realmente inusual en este aeropuerto. Al pasar por el control de pasaportes, me hicieron 10 mil preguntas. Vi que era una "prueba de resistencia" porque lo que buscaban era dinero. La gente detrás de mí, se comenzó a quejar y al "inspector martillo", no le quedó otra alternativa que dejarme ir.

Ahora estoy aquí, en la tranquilidad de el único restaurancitbo que hay en el aeropuerto, tomándome esta cerveza que me sabe a gloria porque el calor que hace es indescriptible.

No sé si regresaré a Brazzaville. Mi idea es continuar mis clases desde Bruselas "online" hasta el 12 de Marzo. Luego tenemos dos semanas de vacaciones hasta el 27 de Marzo. Honestamente, no deseo regresar a Brazzaville. Espero poder llegar a un acuerdo con mi jefe y que me permita terminar el año escolar "online". La situación política, social y de pandemia es mucho más grave de lo que las autoridades les permiten a los medios de comunicación decir o comentar. A pesar de no saber con plena certeza sí regreso o no al Congo, quiero agradecer a mis lectores por el haberme leído durante estos largos casi 6 meses. La experiencia fue enriquecedora desde todo punto de vista.

¡Hasta un próximo Blog!

Carlos Eduardo