2da semana de Febrero... Una semana de 6 días laborales...

 Domingo

Resulta muy difícil el poder escribir algo positivo cuando tienes varios días durmiendo mal por situaciones que realmente escapan de tu control o radio de acción. Anteriormente comenté que vivo justo al lado del Hospital Militar. Ciertamente no es el mejor lugar para vivir pero, de alguna manera tiene sus "ventajas" un tanto discutibles. En primer lugar, no es verdaderamente el mejor lugar para ir ni en caso de emergencia. Según me comentan los locales, carece de muchísimas cosas. Me recuerda a los hospitales de Venezuela ya a principios de siglo que se debía de llevar hasta la inyectadora para que le pusieran a uno la inyección. Bueno, acá no es nada diferente. Aquí debes de llevar absolutamente todo, incluyendo hasta los bombillos para la lámpara del quirófano porque se queman mucho por los cortes de electricidad.

Lo cierto es que, después de estar durmiendo muy poco en los últimos días, esta mañana a la 01:10 me quedé rendido por casi 9 horas sin despertarme. Me desperté para ir al baño y tomar agua. Regresé a mi cama y seguí durmiendo hasta casi las 11:00. Quise seguir durmiendo pero ya los llantos y gritos de lamento habían comenzado. Es tradición de los congoleños de llorar y gritar por las personas fallecidas. En este hospital fallecen muchas personas durante las 24 horas del día. Así que desde el Jueves pasado, han muerto muchas personas y han sido muchísimos los familiares que han estado llorando y gritando por sus seres queridos fallecidos. Me ha costado mucho tener compasión por estas personas porque su dolor me quita el sueño y ya yo estoy a punto de también ponerme a llorar y gritar pero por distinta causa. De hacerlo, creo que no me entenderían y pudiera ser catalogado de insensible por tal hecho. No les he comentado, pero tengo mas de 3 meses durmiendo con tapones de oídos que ya son casi parte de mis oídos y que hasta he llegado al cole con los tapones puestos porque se me ha olvidado quitármelos por la mañana antes de salir.

Para cambiar de ambiente, decidí irme a la "joyería" a comprar unas frutas y verduras. En el camino, me tropecé con este anuncio y que me hizo reír por un buen rato. 

Ya son las 20:43 y, después de haber cocinado mi comida de la semana, me dispongo a irme a dormir. En este momento nadie llora o grita. Y esto se agradece.

Lunes

Anoche pude dormir unas horas más que las noches anteriores. Esto obviamente se traduce en que descansé. Los llantos y gritos con los tapones de oidos se escuchan mucho menos. Ahora lo que hago que es pongo una música de relajación a volumen medio alto para que "filtre" los otros ruidos o sonidos.

Desde la semana pasada, mis rutinas matutinas son cada vez más expeditas en tiempo para evitar escuchar los llantos y gritos que vienen desde el hospital. esta semana laboral tendrá seis días de trabajo porque estamos tratando de adelantar una semana entera de clases del mes de Marzo ahora en Febrero. Esto es porque las elecciones presidenciales son el 22 de Marzo y siempre hay disturbios durante esta semana. Así que estamos trabajando más horas todas las semanas para compensar la semana de elecciones que mantendremos la escuela cerrada como medida de seguridad.

Hoy di mis clases de español y tuve varias reuniones con padres. No dejan de impresionarme las reuniones que tengo con algunos padres. Con algunos me siento que estoy escuchando un relato de algún libro de cuentos de terror "infantil". Con otros me siento que yo estoy hablando en un idioma que no se entiende y que puedo notar en la cara de los padres muchos signos de interrogación de preguntas que ellos mismos se hacen y no desean escuchar las respuestas. Me consta que no es nada fácil ser padre pero no dejo de preguntarme: ¿Por qué siempre los padres buscan a quién hacer culpable de lo que sucede y no son productivos en asumir la responsabilidad que viene con el título de padre o madre? No dejo de pensar en la necesidad imperativa de crear escuelas para padres. Me atrevería a creer que habrían mejores ciudadanos.

Llegué a casa y me puse  al ver que había silencio, me di una ducha y me acosté a dormir una "siesta". Me desperté cerca de las 19:50. Seguía todo en "silencio" pero no duró mucho tiempo. Traté de no pensar en ello y busqué refugio en el rompecabezas pero no resultó. Decidí salir e ir a hablar con "alguien" en el Hospital Militar a cerca de la situación en que nos encontrábamos muchos pero que, tal vez, nadie se atrevía a hablar.

Después de explicar y explicar, al final conseguí hablar con "comandante". Un señor vestido de militar con una bata blanca. Por su aspecto él no parecía ser médico pero si que sabía dar órdenes. Era tanto, que en la "sala de emergencias", él era quien decidía a quien se atendía primero, segundo y así sucesivamente. El señor me preguntó: quel est votre problème monsieur? Le di las buenas tardes y le dije que mi problema era el problema de todos los que vivíamos en el edificio de enfrente. Le dije que ya teníamos días sin tener descanso porque las personas se paraban justo al frente del hospital a llorar y a lamentarse por la pérdida de sus familiares. Le expliqué que, en los últimos días no podíamos conseguir descansar porque los llantos y lamentos han durado hasta más de 24 horas. Le comenté de mi caso y el de muchos vecinos que no podemos dormir. Él entendió y me dijo que a él le estaba pasando lo mismo pero que no sabía que hacer porque podía ser visto como un irrespeto el decirle a las personas que no lloraran o se lamentaran por la pérdida de uno de sus seres queridos. Yo le dije que ese no era el problema, las personas pueden llorar y gritar todo los que deseen pero mejor sería que lo hicieran un poco más lejos de la puerta del hospital. Él estuvo de acuerdo conmigo y me dijo que tal vez era el momento de hacer algo por el bienestar de todos los que vivíamos en el edificio de enfrente.

Luego me preguntó que si yo tenía alguna sugerencia. Le dije que tal vez podían sugerirle a estas personas que se fueran un poco más hacia la avenida principal para que el ruido de los llantos y lamentos se escuchara menos. Le dije que también había que pensar en los pacientes que estaban allí hospitalizados. Me dijo que eso podía ser una idea pero que él tenía otra que no la compartiría conmigo. Luego me preguntó dónde vivía yo y en qué trabajaba. Le contesté y me dijo que su hijo estaba en la escuela donde yo trabajo. Me dijo que no me preocupara y que él trataría de arreglar la situación de la mejor manera.

Llegué a casa a las 20:40 muy cansado porque hacia MUCHO calor (+35C). Me di una ducha y me puse a leer Mujeres del Alma Mía. Eran las 21:20 cuando empecé a cabecear con el libro entre mis manos. Decidí cepillarme los dientes y acostarme a dormir.

Martes

Hoy me desperté muy temprano porque tengo muchas reuniones sin parar a partir de las 07:00 y luego también mis clases de español. Estas últimas son, para mí, un disfrute total porque tengo muy buenos alumnos. Claro, tengo unos 3 alumnos que van a "empujones". Pero la gran mayoría son muy buenos alumnos y rinde bastante bien. En su mayoría, ya casi todos escriben textos de hasta 150 palabras y esto es un gran logro para ellos y un punto de satisfacción para mí.

Cada vez me cuesta un montón el lidiar con padres cuya creencia es que las escuelas son "talleres mecánicos de niños" y que los maestros y profesores no son otra cosas sino mecánicos de humanos con la capacidad de arreglarlo TODO. Hoy no me contuve y le dije a unos padres que ninguno de los profesores éramos "super héroes" con capacidades y recursos super especiales. Se me ponen los pelos, bellos y cabellos como escarpas cuando me dicen: Veuillez réparer mon fils / ma fille. Me les quedo viendo y les repito siempre lo mismo cual mantra: Ce n'est pas un atelier magique pour «réparer» les enfants. Ceci est une école.

Llegué a casa un poco frustrado con tantos sin sentidos pero pensando que los criterios culturales en estos países son definitivamente de aquí y de mas ninguna parte. Trato de entender su forma de pensar y siempre termino sintiéndome como haber entrado a un "laberinto" y yo soy el único que busca cómo salir de este "laberinto", mientras el resto disfruta un mundo el vivir "perdidos". Veo con preocupación aquellos padres que no hablan una gota de inglés y tienen a sus hijos aquí en la escuela sin la más mínima idea de lo que es el sistema de una escuela internacional. Muchos de ellos solo quieren que los hijos aprendan Inglés sin importarles mucho el resto de la carga académica. El concepto de "privilegio" está aquí, por decirlo de manera breve, un poco desvirtuado.

Pero hoy me puse a hacer algo que me desconectara completamente de estas realidades "paralelas" donde me toca navegar en aguas no solo turbulentas sino también turbias.

Sí, logré terminar el rompecabezas de 1.000 piezas. La verdad es que lo disfruté mucho porque me ayudó un montón a poner algunos pensamientos en "remojo" y a realmente no pensar en nada.

Ahora son las 21:40 y me toca realmente ir a mi encuentro con Morfeo.

Miércoles

Mi abuela solía decirme siempre que me veía en misiones "imposibles que sí yo no estaba preso, me andan buscando... Anoche me sentí que estaba durmiendo en una barca en medio del delta del río Catatumbo en Maracaibo, Venezuela. La tormenta eléctrica de casi 4 horas, era definitivamente digna de una película de terror con todas sus especies. Los truenos, centellas y relámpagos fueron infinitos. Sin poder dormir, me paré en la ventana a observar el espectáculo. Que hizo mucha gracia porque, en medio de tanto resplandor de los relámpagos, pude ver que yo no era el único disfrutando del despliegue luminoso.

La tormenta cesó cerca de las 04:00 de la mañana pero la lluvia continuó. Esto me ayudó a conciliar el sueño hasta las 06:10 que fue cuando sonó mi alarma. Me costó un mundo el salir de la cama e iniciar mi rutina matutina.

Llegué a la escuela a tiempo y pregunté sí alguien había visto la tormenta eléctrica y todo el mundo estaba horrorizado. La señora de la limpieza me dijo que anoche, para ella, se estaba cayendo el cielo y que ella esperaba que no se cayera todo porque ella quería vivir. Su manera de describir las cosas me causó mucha gracia y yo le dije que Dios la había escuchado porque todavía había cielo azul.

Hoy el cansancio me venció y después de terminar mis clases, le dije a mi jefe que no me sentía bien y que necesitaba irme a casa. Me fui a casa y cuando estaba llegando, me encontré con el "comandante", quien, para mi sorpresa me reconoció y me dijo que ya había hablado con sus superiores para que las personas que quisieran "honrar" con sus llantos y gritos a sus fallecidos, lo hicieran al otro lado del hospital. Me dijo que esa había sido su sugerencia y que fue aceptada. Yo le di las gracias y seguí mi camino. Ahora se escuchan los llantos y gritos pero solo cuando hay brisa. Cuando no hay brisa, no se escuchan mucho. Me resulta ahora raro dormir sin mis tapones de oido.

Me lavé la cara y me acosté a dormir una larga siesta. Dormí desde las 13:00 hasta las 17:00. Necesitaba este sueño reparador. Me desperté y acabo de terminar de cocinar unos macarrones con queso y pancheta. Me quedaron muy ricos. Ya son las 20:15. Voy a volver a la lectura para luego encontrarme con Morfeo.

Jueves

Anoche dormí como nunca antes había dormido desde que llegué a Brazzaville. Creo que es la primera noche que no se va la luz en toda la noche y que reinaba un silencio verdaderamente desconocido para mí desde que vivo en este apartamento.

Llegué a la escuela y ya me esperaban 3 padres que querían hablar conmigo sobre los test PSAT de sus hijos. Hay padres excepcionales porque están siempre pendientes de las cosas de sus hijos y esto me parece muy bien porque le demuestran a sus hijos que a ellos les interesa su futuro y buscan la forma de ayudarles hasta donde pueden. Por el contrario, hay otros padres que son excepcionalmente desinteresados de todo lo que tenga que ver con la educación de sus hijos a tal punto, que no recuerdan ni el año que están cursando sus hijos. A estos padres y a sus hijos, yo los llamo "las familias silvestres". Y no lo hago a tono de burla sino que es una absoluta realidad porque tanto hijos como padres son absolutamente silvestres. Ellos no saben nada, no conocen nada, no se enteran de nada y creen que, por estar pagando una escuela cara, ya todo está hecho. Y esto me enardece tremendamente porque evaden las responsabilidades y los hijos están, a la buena de Dios.

Hoy tuve una reunión que me dejó con un dolor de cabeza tremendo. No fue realmente la reunión sino el cansancio que tengo acumulado por no dormir bien de manera regular. Esto no me gusta. He comenzado a hacer un poco de relajación y me siento mejor pero sé que debo de tratar de hacer más ejercicios. Por lo pronto llegué a casa y me tomé una pastilla y me puse a relajarme con mi terapia ocupacional.

Ya son las 21:45 y no me di cuenta de que era ya tan tarde. Me acabo de cepillar los dientes y ahora a leer un poco hasta que llegue Morfeo.

Viernes

Esta mañana, después de que sonó el despertador, me quedé dormido. Por suerte volvió a sonar y salí corriendo a ducharme. Y estuvo muy bien porque desde el Lunes, no siempre hay agua para ducharme por las mañanas y es por ello que siempre me ducho antes de acostarme para no sentirme que no me duché por la mañana. Me encanta ducharme por la mañana, siento que es la mejor manera de quitarse la flojera y de despertar el cuerpo.

Con la corredera por haberme quedado adormitado en la cama, se me olvidó el multi-puerto de mi ordenador en casa y, después de llegar a la escuela, me tocó regresarme a casa a buscar el aparato. Durante el viacrucis, porque ya había tráfico bastante pesado, pude hablar con mi amigo Marco Antonio por unos 30 minutos. Siempre es muy grato y alentador hacer un poco de catarsis con gente que uno siente que conoce desde siempre. El taxista que tomé desde la escuela, no hablaba nada de francés, y aquí casi que le pido que me dejara conducir a mí para ahorrarme el tener que, literalmente, manotearlo constantemente para que supiera por dónde debía ir. Al final, llegué a la escuela justo para atender mi primera cita para evaluar a una alumna nueva que comenzó hoy en primaria. 

Hoy ha sido un día reto porque tenía un montón de reuniones y tres clases que dar. Por suerte pude lidiar con todo. Ahora estoy terminando de escribir estas líneas desde mi escritorio antes de irme a la "joyería" a comprar algunas frutas, ver sí consigo carne o pollo y algo de charcutería. Mañana me toca venir a la escuela y no tendré tiempo de ir al supermercado porque los fines de semana el toque de queda comienza ya a las 17:00.

No conseguí todo lo que esperaba comprar. Pero me alegré mucho porque conseguí las frutas un poco más baratas y con estos calores me encanta comerme una ensaladas de frutas con yogurt por lo menos una vez al día. Por suerte tengo pollo congelado y ya veré que cocino el Domingo cuando me ponga en esos menesteres.

Ahora ya son las 20:40 y mañana me toca laborar desde muy temprano. Así que me toca ir a mi encuentro con Morfeo.

Sábado

Confieso que me costó despertarme y levantarme esta mañana. Pero ya estaba desayunando cuando sonó el clarinete de los Sábados a las 06:45. Hoy por la mañana no hace calor (+24C). El día se aspecto nublado pero con más calor a partir de las 10:00. A esa hora estaré en clases hasta las 11:25 cuando comenzará la hora de la comida o el almuerzo. Por alguna razón, desde que estoy en Brazzaville y hablo español, me sale con acento y modismos de España. Les puedo jurar que no lo hago a propósito. Creo que estos son síntomas de nostalgia por todo lo que ha significado España en mi vida. 

Ahora son las 07:50 y debo alistarme para una reunión. Y aquí termina esta semana.

¡Hasta la próxima entrega!